Vivimos en un mundo que va a una velocidad vertiginosa, y en este mundo parece que tener prisa es normal. Desde que abrimos los ojos, nuestra mente va saltando de una tarea a otra: estudiar, trabajar, atender a la familia, mirar las redes sociales, cumplir la agenda, responder a compromisos… Nuestra atención va de un lado a otro, atrapada en listas, cosas pendientes, cosas por hacer, cosas sin terminar, notificaciones…
Luego, llega el momento de descansar y sentimos, por un lado, un gran agotamiento, pero, por otro lado, una mente que parece que no para… Y a pesar de todo lo que hemos hecho en el día, tenemos la sensación de haberlo perdido, de no haber hecho nada, de no haber tenido ni un solo momento de verdadera presencia, de vida.
¿Cuántas veces has sentido que la vida se te va? ¿Cuándo te has permitido simplemente estar? ¿Cuántas veces has sentido que los días pasan, que pasan los meses, los años… Y no te das cuenta? ¿Cuándo fue la última vez que te detuviste a contemplar los rayos de sol filtrándose entre las hojas de un árbol? ¿O miraste el cielo, sin prisa, sin necesidad de tener que hacerlo para obtener un resultado?
La sociedad actual, centrada en la productividad, nos ha llevado a desconectar de nuestra verdadera naturaleza humana, que es pausa, presencia, contemplación.
Puede que estés aquí para tomar conciencia de una nueva forma de habitar la vida, de responder a esa aceleración y compensarla.
La Presencia nos invita a habitar el presente, a hacer una pausa, respirar y sentir una mayor conexión con la vida, con nuestro entorno, con quienes somos. Y para ello, no tenemos que modificar nuestra realidad, sino transformar la manera en la que la vivenciamos.
A través de este curso, te propondremos una vía sencilla para cultivar la presencia y la atención plena para que tengas herramientas que cultiven tu bienestar y la manera en que ves la vida y ves quién eres.